“Quién soy”, a vista de pájaro
Con algunos títulos académicos ya a mis espaldas, y tras más de quince años trabajando en España, tanto en la industria alimentaria y de manufactura, como en entornos académicos, decidí en 2013 dar un golpe de timón de ésos que marcan un antes y un después.
Tras un voluntariado como profesora en un monasterio en Nepal, volví a España, recogí velas y, en menos de tres meses me trasladé a vivir a Suiza a principios del 2014.
¿Por qué? Porque la experiencia en Nepal despertó en mí una nueva dimensión hasta entonces latente.
Lo que en teoría iba a ser un tiempo de retiro enseñando algunas asignaturas a niños del monasterio, tocó ciertas cuerdas internas que me llevaron a indagar incansablemente en la otra cara de los alimentos (y menos familiar para mí): La de su poder para llevarnos tanto a las puertas de la enfermedad como para alejarnos de ella.
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Necesitaba entender qué les ocurría a aquellos niños a los que daba clases, desde un punto de vista nutricional. Lo que yo no sabía en aquel momento era cuánto de esa resonancia hacia ellos tenía que ver conmigo misma.
Uniría esos puntos más adelante.
A esta nueva etapa pertenecen todos los títulos y certificaciones posteriores al 2013: Máster en Estudios avanzados en Nutrición y Salud (ETH Zurich), el concepto de nutrición desde un punto de vista holístico, psicología de la alimentación, interconexión entre el sistema endocrino-sistema inmune-salud digestiva-cuerpo-mente, etc.
Sin embargo, y por interesante que sea la teoría y la comprensión de la misma, la vida me puso también unos “ejercicios prácticos” para ver si lo había comprendido todo: Mi propio viaje para recuperar la salud, perdida por el camino.
Puede que te preguntes: ¿Por qué te cuento todo esto?
Porque uno de los resultados de todo este proceso es precisamente este Proyecto:
Una propuesta de servicio hacia ti,
en la que deseo compartir todo aquello que he experimentado, aprendido e integrado (y lo que no), por si puede servirte en tu propio camino.
¿Interesad@ en lo que puedo ofrecerte? Echa un vistazo a:
Títulos academicos y certificaciones
Zoom sobre mí
Mi viaje hacia ti
Títulos académicos y certificaciones
Todo, absolutamente todo lo que hemos vivido, realizado, o dejado atrás, ha contribuido de un modo u otro a ser la persona que somos en estos momentos.
Bajo estas “lentes” presento un resumen de mis títulos académicos. Véanse, no como una muestra de mis “(dis)capacitaciones oficiales”, sino como una aproximación a:
✶ Mi eterna curiosidad,
✶ Mi insaciable necesidad de conocer, de profundizar, de conectar puntos aparentemente inconexos,
✶ No creer porque me lo dicen,
✶ No hablar de oídas,
✶ Querer ir más allá, contrastar, llegar a mis propias conclusiones.
Ésta es parte de la energía que pongo encima de la mesa cuando trabajo con personas en su proceso de reencontrarse con su salud a través del plato. Ahora la pongo a tu servicio para compartirla contigo, por si te sirve en tu camino. ❤
❀ Mind Body Eating Coach Certification. (Institute for the Psychology of Eating; USA) 2019
❀ Hormone Health Specialist. (Institute of Integrative Nutrition, IIN) 2018-2019
❀ Integrative Nutrition and Holistic Nutrition Health Coach. (Institute of Integrative Nutrition, IIN) 2017-2018
❀ Global Health Specialist. (University of Copenhagen) 2015-2016
❀ Immunology certificate. (Rice University) 2015
❀ (MAS) Master in Advanced Studies in Nutrition and Health. (ETH, Zurich) 2014-2016
❀ (MAS) Master in Supply Chain Management. ICIL. Barcelona 2006-2008
❀ Cursos de doctorado en Ingeniería Ambiental Universidad de Almería/Universidad de Córdoba 2001-2002
❀ Ingeniera Agrónoma. Universidad de Almería-Universidad de Córdoba 1997-2001
❀ Ingeniería de Industrias Alimentarias. Universidad de Almería 1993-1997
La lista continúa y continúa, y por supuesto, se encuentra en permanente expansión… ¡como el Cosmos 😉!
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Zoom sobre mí
❀ Más allá de títulos y certificados oficiales, me considero una “ferviente activista de la salud”.
❀ Hace mucho tiempo, un ser humano extraordinario me “etiquetó” como “Sherpa emocional”. Me sentí profundamente honrada, y en este párrafo le rindo tributo ❤.
❀ Espeleóloga del cuerpo y de la psique humana. Difícil de convencer con titulares, disfruto diseccionando información desde diferentes ángulos, hasta encontrar la perspectiva que me haga “click” (o no).
❀ ¡Eterna estudiante! Paso incontables horas leyendo, escribiendo, tomando notas, “conectando los puntos” y trazando otros nuevos. ¡Me apasiona!
❀ Practicante de la cita de Norman Cousins: “Una auténtica carcajada es una buena forma de hacer ejercicio internamente, sin tener que salir de casa”. Confesión: ¡Pudiera ser en parte por mi naturaleza perezosa! 😉
❀ Lenta como mamut con tacones al despertar, me vuelvo imparable durante el día cuando encuentro el “para qué” o el “para quién”.
❀ Apasionada por los animales, con acento especial en perros, pájaros (y mis nuevas amigas, las vacas). Conviviendo con ellos he aprendido mucho acerca del estar presente y del amor incondicional.
❀ Oficialmente bautizada como “cabra alpina”, me he ganado el apodo a pulso cada vez que me calzo las botas y echo a caminar montaña arriba. ¿El premio? Contemplar con absoluta reverencia esa obra de arte llamada Naturaleza, a miles de metros de altitud.
❀ Paso el día bajo una permanente “Playlist”: de Bach a Muse, de tambores africanos a Eunadi, pasando por (casi) todos los estilos imaginables. Conversaciones, momentos, paisajes, paseos, fragmentos de libros, notas al margen… ¡A todo le pongo “Banda sonora”! ♫
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Mi viaje hacia ti
Como "Andaluza por los cuatro costaos”, pasión y espontaneidad siempre fueron características destacables en mí. Sin embargo, “don Perfeccionismo” también entró en mi vida desde bien temprano, manteniendo el control de la nave durante muchos años.
Ya lo dijo Séneca: “No hay viento favorable para el que no sabe dónde va”. Una muy buena descripción de mi piloto automático durante demasiado tiempo.
Mi rueda de hamster, de un vistazo
Además de los títulos universitarios oficiales, obtuve otro grado de Máster sin ni siquiera haberme matriculado: Un Máster en negación de mis necesidades, muy especialmente las relacionadas con la salud y el cuerpo.
También me convertí en Especialista en llevar a mi cuerpo y mi mente a límites de agotamiento extremo, fundamentalmente debido al trabajo.
Como guinda al pastel, proclamaba a los cuatro vientos, y no sin cierto sentido de orgullo, que “no tenía tiempo para cocinar” … (¡sin comentarios!).
Trabajo, responsabilidades, estar permanentemente con la atención centrada fuera de mí, y un sentido un tanto exacerbado de “hacer lo correcto en todo momento”, colapsaron mi luz de guía durante años.
Ni un solo pensamiento sobre mis necesidades más básicas de autocuidado.
El piloto automático seguía intacto.
Señales de alerta aparecieron a lo largo del camino… ¡y cómo!
Mi cuerpo enviaba señales de SOS desde bien temprano: estrés, ansiedad, migrañas, problemas de sueño, la comida como “ansiolítico natural”…
La lista de síntomas era lo suficientemente incómoda como para no permitir un estado de bienestar, pero lo suficientemente “soportable” como para seguir adelante sin más pestañeos. Y eso hice.
El momento “Aha” vino en forma de puñetazo cósmico
Se dice que el Universo es un Maestro tozudo, especialmente si el alumno es lo suficientemente obtuso como para no aprender la lección.
Pues bien, mi lección sobre “baja un grado o te paro en seco”, vino en forma de enfermedad intestinal. Mi sistema digestivo perdió toda capacidad de absorber alimentos.
L-i-t-e-r-a-l-m-e-n-t-e.
¿No resultaba tristemente irónico que, trabajando en el sector de la industria alimentaria y de la salud posteriormente, fuese incapaz de nutrir a mi propio cuerpo?
El famoso momento “Aha” no me llegó como rayo de inspiración divina, sino como puñetazo cósmico.
¿Qué lección tenía que aprender?
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“La cicatriz es el lugar por donde entra la luz”.
- Rumi
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Mi cuerpo estaba gritando desesperado para ser escuchado; y por primera vez en mi vida, estaba dispuesta hacerlo.
¿Qué hice entonces?
✿ Comencé una cruzada “en nombre de mi salud” que me llevó a derroteros que jamás hubiera pensado.
✿ Me sumergí de lleno en los principios de la Medicina Funcional, la medicina Ayurveda, la salud hormonal y el funcionamiento del sistema inmune.
✿ Seguí a varios de los científicos punteros en el área de nutrición y salud desde una perspectiva más holística.
✿ Leí todo lo que cayó en mis manos sobre salud intestinal: literalmente, cientos de artículos científicos, ponencias, libros, etc.
✿ Comencé mi andadura en el Institute of Integrative Nutrition (IIN) de New York.
✿ No pude parar de bucear en el amplio y fascinante mundo de la psicología de la nutrición.
✿ Comencé a cocinar a diario, por y para mí. Esto, en sí mismo, fue un salto cuántico en mi recuperación y en mi vida.
✿ Descubrí, entendí y digerí cuántos estragos habían causado el estrés y la ansiedad en mi cuerpo, mi salud y mi vida. Otro momento “Aha” pero que me costó más tiempo integrar y modificar.
✿ Me vi fascinada por el mundo de la “conexión cuerpo-mente” y las llamadas “enfermedades somáticas”. Otro sapo difícil de tragar en esos momentos.
✿ Dejé mi trabajo (¡Otro salto cuántico!) y decidí que el mundo profesional “de 9 a 5” (o de “9 a 8”) había acabado en mi vida. Esta decisión fue la semilla temprana de lo que en estos momentos comparto contigo ❤
✿ Comencé (muy lentamente) a integrar el concepto de “un día a la vez” y el maravilloso regalo de los “pequeños pasos”.
Habiendo sido (mejor dicho, con tendencia a ser) una persona de “todo o nada”, este cambio de interruptor vino acompañado de una gran resistencia por parte de mi viejo piloto automático.
✿ Comencé a prestar atención a mis necesidades y a expresarlas abiertamente a otros. No a todos les gustó.
✿ (Re)descubrí e hice espacio para viejos (y nuevos) hobbies, que pronto se convirtieron en pasión.
✿ Volví a calzarme mis viejas botas de senderismo tan pronto como mis síntomas agudos bajaron su intensidad.
Unos pocos meses más tarde, la mayoría de mis síntomas remitieron. El especialista de digestivo literalmente no lo creía.
¿A qué lo achaco? A una determinación implacable y la absoluta convicción de que no era el final de mi historia, pero sí del modo en el que la estaba escribiendo hasta ese momento.
Y si te preguntas por la lección del Universo que tenía pendiente, aquí tienes algunas de las enseñanzas más importantes que saqué durante mi viaje:
❤ Toda mi vida pendiente del “exterior”, y no había nadie a quien salvar, sino a mí misma
❤ Enfermamos por la mente, y sanamos por el cuerpo. Los grandes “nudos Gordianos” de nuestra vida comienzan a desenmarañarse volviendo la atención a nuestro cuerpo.
❤ Cuando tu vida se alinea con tu voz interna y tu propósito, el “nudo” va cediendo, y al cuerpo le resulta más sencillo volver a su estado inherente de salud. Las tensiones van dejando lugar a la homeostasis natural.
Y ahora mi camino me trae hacia ti
¿Ha acabado mi viaje hacia mi salud y mi bienestar?
En absoluto. Aún me quedan muchas cosas por integrar y mejorar en mi relación con mi cuerpo, mis necesidades y mi bienestar. Cada día es un aprendizaje.
La diferencia es que ahora le pongo oído.
Entonces, ¿por qué te estoy contando esto ahora?
1. Porque a lo largo de mi propio camino, he descubierto, probado, contrastado e integrado muchas herramientas y soluciones que puedo poner a tu disposición, por si te sirven.
2. Para que ahorres tiempo, energía (¡mucha!) y dinero en tu búsqueda de una solución eficaz y sostenible PARA TI.
3. No tengo todas las respuestas (¡ni mucho menos!), pero quizás las que puedo ofrecerte te ayuden a aliviar tu propio camino.
4. Porque “he estado ahí”. He experimentado la soledad, la desesperación, la frustración, la indefensión, el sentir que “no hay salida”, el agotamiento físico y mental en mi cruzada personal a la (re)conquista de la salud.
5. En ocasiones, el viaje se hace más llevadero con un par de ojos sonrientes que te acompañen, amén de todas las teorías nutricionales y balances hormonales que haya que realizar durante el trayecto.
Me ofrezco a CAMINAR CONTIGO, SONRIENTE, durante el tiempo que estimes oportuno.
6. Porque durante mi propia aventura de salud personal, descubrí que lo que estoy haciendo ahora está alineado con la auténtica Teresa, y que, si no conecto con ella, mi alma se entumece y mi pasión no puede prender.